Sánchez y Casado se acusan mutuamente de bloquear la renovación del CGPJ

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido este viernes al PP que "recapacite" en su actitud de mantener "vetos" para la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y ha afirmado que su bloqueo "no se entiende" después de haber logrado un pacto en RTVE.

En rueda de prensa en el Palacio de La Moncloa, Sánchez ha apuntado que "hace falta más coraje el acuerdo que para el enfrentamiento" y ha considerado que si es "imprescindible" el acuerdo para el CGPJ, lo es más en un momento en que la sociedad está "exhausta" por los estragos causados por la pandemia.

El jefe del Ejecutivo apuesta así no solo por renovar el órgano de gobierno de los jueces, sino también los demás órganos constitucionales y ha hecho hincapié en que el Gobierno ha sido "flexible", ha planteado "alternativas" y ha demostrado que es posible el consenso al renunciar a planteamientos iniciales, como ha sucedido con el Consejo de Administración de RTVE.

Tras la ruptura de la negociación para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el presidente del PP, Pablo Casado, ha reunido a su Comité de Dirección y los "populares" han culpado al PSOE del bloqueo por "permitir puertas giratorias" al proponer a Victoria Rosell como vocal.

Pese a haber tomado impulso las últimas semanas, las negociaciones entre el Gobierno de Pedro Sánchez y el PP para renovar el órgano de Gobierno de los jueces, caducado desde hace más de dos años, se rompieron de madrugada, un choque que el PP computó a los socialistas por proponer al juez Ricardo de Prada, que juzgó la primera etapa de Gürtel.

Este viernes, el PP ha dado un nuevo nombre para explicar el desencuentro, el de Victoria Rosell, actual delegada del Gobierno contra la Violencia de Género y exdiputada de Unidas Podemos.

"El PP no acepta la propuesta del PSOE de permitir puertas giratorias entre política y justicia", han señalado fuentes de este partido, que recalcan que el PP "no acepta" que sea vocal porque es "un cargo político del Ejecutivo" y uno de sus requisitos es la "despolitización" del órgano de Gobierno de los jueces.

Los de Pablo Casado tampoco aceptan como vocal al magistrado de la Audiencia Nacional Ricardo de Prada, al considerar un "fraude de ley" su nombramiento como vocal porque "ni ha sido elegido por sus compañeros dentro del turno judicial ni ha recogido avales para ello", por lo que consideran que accedería "al CGPJ por la puerta de atrás por el turno de juristas".

El PP defiende que su posición sigue siendo la de "alcanzar un acuerdo para la renovación de importantes instituciones del Estado, como el CGPJ, el Tribunal Constitucional, el Defensor del Pueblo, el Tribunal de Cuentas y la Agencia Española de Protección de Datos", pero argumenta que "se debe producir para fortalecer las instituciones y no para debilitarlas".

Y desde Génova apuntan además a las diferencias entre los socios de la coalición: "Cuando Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se aclaren en sus peleas internas, que nos llamen. Sánchez no puede pretender reforzar su coalición con Podemos a costa de sacrificar la justicia española", recalcan .