Pablo, ¡eso es de novatos!

Por Mónica Borrás

Lo acontecido esta última semana en nuestro país ha sido lo peor que nos ha podido

ocurrir como nación. La moción de censura planteada por VOX y Santiago Abascal trajo

un atisbo de esperanza, aunque sólo fuera por la ilusión de hacer historia y presentar la

disconformidad con este Gobierno. Fueron dos días de durísimo debate en el que se fue

demostrando que los políticos, a los que se les ha conferido nuestra representación, no

gobiernan para España ni piensan en los españoles. La moción de censura era a la

pésima gestión del Gobierno, y el presidente del partido mayoritario de la oposición,

Pablo Casado representó un papel inaudito, hizo de oposición a la oposición.

Tanto, que hasta los miembros del Gobierno socialcomunista le dedicaron aplausos y

felicitaciones, el propio Presidente del ejecutivo alzó los brazos abiertos en señal de

aprobación...como si dijera bienvenido al Frente Popular; mientras el Vicepresidente

Iglesias le aplaudía a la par que le daba un “excelente” de nota fin de trimestre como si de

su alumno aventajado de la universidad se tratase.

Sentí verdadera vergüenza y se revolvieron las ideas dentro de mi cabeza, recuerdo que

la indignación se adueñó de mí. No podía creer lo que acababa de suceder, parecía irreal.

Casado había hecho un discurso desmarcándose de VOX -y de su amigo Santiago

Abascal-, a base de ataques personales y descalificaciones hirientes sin precedentes en

la historia política de España. La educación y las formas no se debían de hipotecar de esa

manera. Los españoles a los que representa Casado, no merecen ser cómplices de este

despropósito vulgar. El giro correccional al “espacio centroderecha”, fue brusco y se pasó

de virada a babor, abrazando al Frente Popular, por lo que sus votantes no se han visto

representados y ha supuesto una gran sangría en sus filas.

Esta moción ha servido para que se quiten las caretas y se posicionen todos los partidos

políticos, se ha demostrado que al consenso progre se ha adherido también el PP, ahora

todos juntos forman un bloque, el Frente Popular …. y VOX en la oposición. Más vale

estar solos que sin principios pues sin cimientos sólidos no se sostienen los edificios.

Hemos venido a cumplir con España y es lo que la moción de censura pretendía, más allá

de su aprobación o no, se trataba de dar voz a los españoles que están descontentos con

la gestión del ejecutivo, de reprobar a Sánchez por su nefasta gestión, por sus

mentiras y por el alto coste de esta pandemia que se ha llevado a más de 56.000

compatriotas, arruinado a multitud de familias, autónomos, empresas…

Ahora que Sánchez está convencido de la colaboración de Casado en su consenso, ha

aprovechado para todavía dar una vuelta de tuerca más y nos ha decretado un estado de

alarma con toque de queda, eso si, de gestión autonómica para no pringarse

demasiado; que será más o menos estricto, a gusto de cada mandamás en su territorio,

cual si de señores feudales se tratara.

A Casado le han estafado por confiado, prometiéndole participar en la negociación del

CGPJ, y en menos de 24 horas estaba Sánchez ultimando el contacto con el Consejo de

Europa para defender su reforma judicial. Como un caramelo a un niño.

No se comprende cómo Pablo, ha podido depositar su confianza en alguien de este

Gobierno -y menos en Sánchez- después de haber mentido sin cesar a toda España, ha

engañado a los españoles a conciencia, repetidas veces y sin escrúpulo alguno, eso

es de novatos y crédulos.

Ahora el Gobierno sabe que tiene en su poder al PP. Quizás le ha prometido acallar algún

caso de corrupción candente y humeante como si estuviera recién salido de la cocina.

A este PP, pusilánime y correctito, se equivocó al atacar a su único posible socio de

gobierno de derechas, en vez de utilizar la moción de censura para lo que es, para

reprobar al Gobierno; han errado el tiro, se han disparado al pie derecho y ahora todo

escora hacia la izquierda. Gracias Pablo.

Es ahora cuando nos amordazan, nos encierran, nos limitan la movilidad y nos

censuran...ya piensan que, total 52 diputados de VOX, sólo son la nota discordante en el

hemiciclo.

Ten cuidado Sánchez, España está despertando.