ONG ¿donde estáis?
En ocasiones echo en falta esos colectivos que siempre están defendiendo al más débil, a los que sufren por su condición de sexo, raza, laboral, estatus, etc.
Recuerdo alguna ocasión cuando una mujer ha sido atacada o que haya sufrido un mal suceso al que ese colectivo feminista no ha salido a defenderla, quizás porque era la mujer de un guardia civil o ser una política de derechas.
Recuerdo todos los años cuando los musulmanes practican su religión cuando celebran la fiesta grande del islam y el colectivo animalista no sale en defensa de esos corderos.
Recuerdo antes del coronavirus, infinidad de organizaciones contra el hambre, asociaciones pro personas sin recursos, asociaciones cercanas de esos vecinos faltos de atención.
Hoy echo en falta a muchas de esas ONGs para paliar la hambruna que existe, las familias de clase baja y media que no pueden ya ni comprar carne o pescado.
Pero si me acordaré cuando vayan a pedir todo tipo de subvenciones, ayudas económicas para esas organizaciones, asociaciones, etc. porque cuando hay que dar el callo se dan la vuelta, cuanto hay que estar ahí a pie de cañón, les viene grande la situación, se aturullan, se agobian.
Menos mal, que existe mucha más gente que sin necesidad de estos colectivos que se nutren de las administraciones, aportan su persona para ayudar, otros sus conocimientos, otros ponen a disposición de los demás sus instalaciones, otros aportan su materia prima, otros incluso realizan aportaciones económicas.
Me quedo con mucha gente anónima que no se da la vuelta, que se pone de frente y dice aquí estoy, “no preguntes que pueden hacer por ti, haz lo que puedas hacer por los demás”.
Este coronavirus se ha llevado muchas personas por delante y eso es algo muy triste, pero va a ser un filtro para saber quién merece la pena y quien no.