La concejalía de Tercera Edad trabaja para erradicar la soledad no deseada en Altea a través del Observatorio de Mayores
Altea, 14 de mayo de 2025. La edil de Bienestar Social y Mayores, Anna Lanuza, informa sobre la elaboración de un estudio de diagnóstico de la soledad no deseada que ha puesto en marcha el Observatorio de Mayores local. En palabras de Lanuza, “este es un trabajo que nos va a permitir abordar de manera más resolutiva y concreta los temas que afectan a la Tercera Edad, uno de los ejes principales de la gestión del departamento”.
“Este estudio de diagnóstico de la soledad no deseada, que realiza el área de Tercera Edad a través del Observatorio de Mayores, nos permite conocer aspectos del bienestar de los mayores y de la soledad que sufren. Soledad no deseada que afecta en un 21,8% a las mujeres, frente al 18% en hombres”. Ha señalado la responsable municipal de área.
A estos datos, Lanuza ha añadido que “sabemos que quienes más sufren soledad no deseada es el colectivo de mayores. Esto se acentúa en la población extranjera que, además del reducido círculo social que tienen, se suma que muchas veces la familia reside en otro país”. A lo que ha añadido, “hay que tener en cuenta que es un problema que no radica siempre en la singularidad de vivir solo o sola, sino que nos encontramos con muchas personas mayores que tienen familia y se encuentran solas por cuestiones como la falta de sociabilización. Además, hay personas mayores que viven en pareja pero se sienten solos o solas por motivos como el estar lejos de familiares o la falta de relaciones sociales y de ocio. Aunque, evidentemente, la más grave es la vivida por personas que están absolutamente solas”.
Para Lanuza, poner remedio a esta soledad es una de las razones que han llevado al departamento de Tercera Edad a realizar este estudio diagnóstico y a la puesta en marcha de numerosas actividades que ayudan a paliar este aislamiento no deseado.
Anna Lanuza, quien ha profundizado en el problema de la soledad que padecen en gran medida las personas mayores, ha hablado de muchas formas de soledad y todas son preocupantes. “Vivimos en una sociedad cada vez más individualizada y quienes más acusan este individualismo es el colectivo de gente mayor que en pocas generaciones han pasado de vivir en comunidad a vivir en una sociedad que cambia a pasos agigantados, por eso trabajamos con empeño en poder paliar esta soledad que puede derivar en problemas de salud, principalmente, en problemas de salud mental”.
Por su parte, Amaya Madaleno, trabajadora social y responsable del Observatorio de Mayores, ha detallado que, “cada vez somos una población más envejecida y esto no es ajeno a nuestro municipio, la población mayor de 65 años en Altea cada vez crece, por lo que aspectos como la soledad o la necesidad de proyectos y recursos para paliarla han de tener prioridad y por eso el estudio que estamos realizando sirve para conocer datos precisos que nos permiten poner en marcha actividades beneficiosas para esta población mayor; además de proyectos futuros a corto plazo, como ha sido la Oficina del Mayor, recientemente presentada y que forma parte de esas propuestas de mejora ante la soledad no deseada. Además, se están llevando a cabo talleres de memoria, mantenimiento personal, y actividades de ocio como paseos saludables, encuentros sociales como las tardes de baile y meriendas, programas intergeneracionales como jornadas de cocina y canto de villancicos en Navidad”. Actividades que también recoge el estudio del Observatorio de Mayores.
Respecto al Observatorio de Mayores, Madaleno ha puntualizado que “es una herramienta necesaria, además de ser clave, para poder trabajar desde un punto de partida real de la situación en la que se encuentra la tercera edad en nuestro pueblo. De esta manera podemos gestionar de manera más resolutiva para detectar los casos de solead en las personas y de este modo poder acompañarlas, construir redes comunitarias y sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de la sociabilización en nuestros mayores”.
Finalmente, Anna Lanuza ha apelado a la detección precoz de la soledad no deseada para poder combatirla: “el primer paso para combatir la soledad no deseada es la detección precoz de la misma, es decir, que la persona que sufre soledad no llegue al extremo de que su situación personal pueda comportar problemas de salud mental, como cuadros de ansiedad o depresión, problemas físicos y psicomotrices o problemas de salud general, con todas las consecuencias que ello conlleva. Por eso es tan importante que se realice este estudio”.