Ciclosporina, el prometedor fármaco que reduce un 81% las probabilidades de fallecer por Covid-19
Los pacientes de Covid-19 que fueron tratados con ciclosporina en
el Hospital Universitario Quirónsalud Madrid tuvieron un 81 por
ciento menos de probabilidad de fallecer que aquellos enfermos
que no recibieron este fármaco. Esta es la principal conclusión a la
que ha llegado el Grupo de Investigación en Covid-19, liderado por el
Servicio de Medicina Interna de dicho hospital, junto con la
Universidad Europea, tras realizar un estudio retrospectivo que
analiza los tratamientos de más de 600 pacientes con coronavirus
ingresados en este centro sanitario desde el 10 de marzo hasta el 15 de
abril de 2020. Los resultados se publican la revista «E Clinical
Medicine», del grupo «The Lancet».
«Los pacientes incluidos en este estudio sufrían afectación
respiratoria suficientemente importante para necesitar ingreso
hospitalario. Hemos analizado sus características clínicas y hemos
analizado tratamientos que recibieron. Nuestros pacientes no difieren
en las características de otras series publicadas y los factores
pronósticos son similares (edad, gravedad y extensión de la afectación
pulmonar y algunos parámetros inflamatorios). En relación con los
tratamientos recibidos hemos descubierto que la supervivencia de
los pacientes que fueron tratados con ciclosporina era
mayor respecto a los enfermos que no fueron tratados con este
tratamiento. De hecho, en nuestra serie, los pacientes que recibieron
ciclosporina tuvieron un 81 por ciento menos de probabilidad de
fallecer que los pacientes que no recibieron este tratamiento», explica
el doctor Daniel Carnevali, jefe del Servicio de Medicina Interna del
Hospital Universitario Quirónsalud Madrid y profesor de la
Universidad Europea.
El Covid-19, además de producir síntomas iniciales fruto de la
replicación viral, puede agravarse de forma que, entre el octavo y el
décimo día, algunos pacientes desarrollan neumonía y predomina un
efecto inflamatorio en el que la propia respuesta inmunológica
del enfermo es la que daña al pulmón. Con el objetivo de
combatir esta inflamación se han postulado varios fármacos para
reducir la activación del sistema inmune en esa etapa de la
enfermedad. En el Hospital Universitario Quirónsalud Madrid se han
utilizado esteroides, tocilizumab y ciclosporina. Este último es
un fármaco que posee, por un lado, una acción antirreplicativa del
virus y, por otro, modifica la respuesta inmune.
El equipo de investigación Covid del hospital, formado por
especialistas en Medicina Interna, Radiología, Neumología, junto con
otros servicios médicos del hospital, el área de enfermería y con la
colaboración del Grupo de Asesoramiento Metodológico y Estadístico
de la Universidad Europea, han analizado las características de todos
los pacientes del estudio y los tratamientos recibidos. «Hemos
apreciado que las características de nuestros pacientes son similares a
las descritas por otros grupos: 69 años de media,
predominantemente varones, con tasas de comorbilidad asociadas
similares (47% hipertensión; 16% diabéticos; 22% enfermos cardiacos;
19% enfermos respiratorios). Hemos evaluado estadísticamente las
variables que podrían estar asociadas al fallecimiento o supervivencia
al alta», describen.
El doctor Carnevali advierte de que la enfermedad por coronavirus
«aún no tiene un tratamiento estándar». «Durante la primera etapa de
la pandemia utilizamos terapias sobre las que teníamos una razonable
esperanza de que tuvieran efecto, pero sin ensayos clínicos que los
avalaran. Se utilizaron antimaláricos como la hidroxicloroquina,
antivirales como el Lopinavir-ritonavir; antibióticos; corticoides y
fármacos que actúan en la fase inflamatoria de la enfermedad como el
tozilizumab y la ciclosporina», explica. «El hallazgo más
sorprendente de nuestro estudio es que los pacientes que
recibieron ciclosporina tuvieron una supervivencia mayor respecto a
los que no la habían tomado. Sin embargo, los resultados hay que
tomarlos con precauciones. Nuestro estudio es retrospectivo, no
es un estudio randomizado doble ciego que comparara fármaco a
fármaco. Lo que sí hemos comprobado es que los pacientes que han
recibido ciclosporina no son esencialmente diferentes al resto de
pacientes, sufrían unas comorbilidades similares y sin embargo, su
resultado clínico ha sido mejor», concluye.
Para llevar a cbao este estudio se analizaron diferentes variables que
pudieran influir en los resultados de los pacientes afectados por
Covid-19. «Realizamos un análisis de factores que pudieran influir
sobre la mortalidad del paciente como la edad, el score radiológico, la
necesidad o no y el tipo de ventilación mecánica utilizada, los
tratamientos… primero en un modelo univariante y luego en un
modelo ajustado y observamos que el hecho de que los pacientes
fueran tratados con ciclosporina protegía frente a la mortalidad. De
hecho, los pacientes que no habían recibido ciclosporina tenían 4,22
veces más posibilidades de morir que los que habían recibido
este tratamiento», detalla Israel J. Thuissard, miembro del Grupo de
Asesoramiento Metodológico y Estadístico de la Universidad Europea.
El doctor Carnevali asegura que han encontrado «indicios que la
ciclosporina podría ser un fármaco prometedor. «Para
confirmar esta hipótesis sería necesario un ensayo clínico en el que se
pudiera aleatorizar entre pacientes que tomaran ciclosporina o
placebo», concluye.