¡UN SIGLO (100 Años) ESPERANDO!
El culpable de este artículo, o mas bien su detonante, ha sido el tiempo invernal que nos ha llegado y nos rodea. Tanto la prensa provincial como la local han llenado sus columnas con la noticia sobre las medidas que el equipo de gobierno de Benidorm, ha puesto en marcha ante la llegada del frio polar. Locales del centro Llorca Llinares, Cruz Roja, Policía Local, Protección Civil... dedican sus trabajos y esfuerzos para paliar los efectos de las inclemencias meteorológicas y evitar que hagan mella en el colectivo de personas desamparadas en nuestro municipio. Muy bien, es una de sus funciones humanitarias y para eso están.
El asunto no tendría mas trascendencia si no fuera que llevamos UN SIGLO (100 Años) esperando que la Fundación Roig-Cortés funcione correctamente y me temo que ya sea demasiado tarde para reconducir su fines originales: Educar y alimentar a los niños pobres de Benidorm y albergar, cuidar y alimentar a los ancianos pobres de nuestro municipio, con una salvedad, sin esperar a que un “frio polar” nos atenace, actuando los 365 días de cada año desde hace cien.
Es difícilmente asumible por cualquier persona con un mínimo de valores sociales, que no se revele ante esta situación bochornosa, vergonzante e indignante. Ya han transcurrido cien años (UN SIGLO) desde que el matrimonio Cortés-Roig donó todos sus bienes para el destino que apuntaba líneas arriba y estemos como el primer día. Pobres (o parias) olvidados y desatendidos por la Fundación y todo el mundo callado, en sepulcral silencio.
Y me pregunto: ¿Acaso soy el único vecino que conocedor de esta ignominiosa situación ha tratado de dar al César lo que es del César sin hasta el momento actual conseguirlo? No, ha habido otro vecino que en su día trató de conciliar los deseos de los fundadores con el mal hacer de los patronos que se supone dirigen la Fundación. Y amplío el interrogante, ¿es posible que entre los 72.000 vecinos censados, no haya alguien más, capaz de ayudar a poner los puntos sobre las íes en este asunto?. Desgraciadamente la respuesta es por el momento, ¡no hay más!.
Pero estoy seguro de que si los hay. Parte de ellos no actúan por simple desconocimiento del asunto; otra parte, conocedores del problema, piensa “ese toro no está en mi cartel, que lo lidie otro” y por último otra parte está “dormida” y habrá que despertarla. Este es el objetivo del artículo, dar a conocer el problema, presentar a los conocidos actores de la absurda y desagradable situación y tratar de despertar a los durmientes. Por ello, si leyendo este artículo piensas que puedes colaborar a que el “César” recupere sus valores morales y sociales, no lo dudes, ponte en contacto conmigo, ayúdame a que niños y ancianos en situación de pobreza, sean de una vez por todas atendidos por la Fundación.
Hace UN SIGLO, los fundadores nombraron gestora de la Fundación a una congregación, las Hermanas de la Doctrina Cristiana, con dos condicionantes: Una, poder enajenar parte del patrimonio caso de no contar con los medios económicos suficientes para su doble cometido con niños y ancianos y otra cuidar del panteón familiar. Nombraron como patrones de la Fundación, encargados de supervisar las actuaciones de la misma, al Alcalde, Jefe de la Policía, Notario mas antiguo, Maestro mas antiguo y alguno mas que no recuerdo.
La guerra civil supuso un freno a las actividades de la Fundación, pero terminada esta resurgió y comenzó la diáspora de las inmensas propiedades donadas. Así, una de las propiedades subastadas -no sabemos con que finalidad- lo fue por 4 millones de las antiguas pesetas. Problemas judiciales de uno de los adjudicatarios llevó a una tasación judicial de la tercera parte de la finca por 99 millones de pesetas -lo que daría un valor total de la finca matriz de 300 millones aproximadamente. La excelente gestión tanto de la congregación como de los patronos, es evidente.
Una y otros es igualmente evidente que sabían leer pero curiosamente no sabían interpretar lo leído, vistos los resultados de la operación.
Con similar estilo ha seguido funcionando (¡!) la Fundación hasta el momento actual en el que el global del patrimonio ha quedado reducido a una finca en el Rincón de Loix, donde hay instalado un geriátrico exclusivo para las hermanas de la Doctrina Cristiana (por cierto, soy cristiano desde hace mas de 75 años y desconozco que Doctrina Cristiana han practicado, al menos no la que en su día me enseñaron y practico) y una Guardería Infantil de pago. La otra propiedad es el Colegio Privado sito en la calle Pal, también de pago, pero de “pago encubierto” puesto que los recibos del efectivo cobrado por la enseñanza y comedor, dicen ser “donativos”. Durante todos estos decenios, los patronos sorpresivamente siempre han estado mirando hacia otro lado.
No solamente no se han respetado los deseos de los fundadores, sino que como puntilla del bochornoso espectáculo, el panteón familiar ha sido cuidado ocupándolo con los cadáveres de las hermanas de la Doctrina Cristiana fallecidas...
Inevitablemente, llegados a este punto son innumerables las preguntas que surgen, pero entre ellas destacan dos, incluso tres:
-¿Hemos dejado conscientemente la educación de nuestros hijos en tales manos?
-¿Hemos tenido y tenemos patronos capaces de entender el idioma castellano?
-¿Hasta cuándo estamos dispuestos a permitir esta situación?
Llevamos UN SIGLO (100 Años) esperando.
José Antonio Corachán Marzal
Vecino de Benidorm