El Partido Popular de Toni Pérez hace historia en Benidorm

Las urnas han hablado. Y de qué forma lo han hecho. Evidentemente, en casi todos los rincones de España retumba el carpetazo de la ciudadanía a la izquierda y a sus hastiados gobiernos. La gente ha votado en masa Partido Popular y en segunda instancia VOX. La gente ha votado derecha y ha votado sobre todo: cambio. Pero existen sus excepciones. En Benidorm esta última consideración ha sido todo lo contrario; la gente ha votado: continuidad. Y evidentemente se debe a una gestión por parte del equipo de gobierno de los de Toni Pérez que ha estado a la altura de Benidorm, y ojo, que estar a la altura de dirigir una ciudad como esta, siendo la capital turística de Europa, no es nada fácil.

Nunca en la historia de unos comicios municipales benidormenses un partido político pudo presumir de contar en sus filas con un total de 16 concejales avalados por casi 14.000 votantes. El récord lo tenía el propio Partido Popular allá por el 99 donde consiguió 14 concejales con un total de 11.329 votos. Y este 28M el PP de Benidorm ha roto todas las estadísticas. Se esperaba una victoria contundente de los populares y al menos renovar la mayoría absoluta, pero estos comicios municipales no solo han avalado esta gestión que dura ya ocho años, sino que los benidormenses han dado carta de libertad y plena confianza al proyecto del PP en la ciudad de los rascacielos, a diferencia de un PSOE que se hunde en la miseria y cada vez anda más cerca de la irrisoriedad política.

Desde el 2011 no paran de acumular fracaso tras fracaso en las urnas. Pasaron de contar con la confianza de más de 10 mil benidormenses y de esta manera gobernar en el 2011 a perder la mitad de los votos y quedar relegados a la oposición en 2015, y más tarde, en 2019 volvieron a fracasar viendo como el PP conseguía una mayoría absoluta en sus narices a pesar de que, en ese año, el bipartidismo volvía a cobrar fuerza ya que los partidos políticos como el de Leopoldo, Gema Amor, Compromís o C´s desaparecían prácticamente en su totalidad debido a una pérdida brutal de votos que el PSOE apenas pudo captar, pues pasó de 5000 votos a unos insuficientes 7000 que no servían para absolutamente nada ante una todopoderosa mayoría absoluta del Partido Popular. Y para más inri, ahora en este 2023 llega un batacazo que pide a gritos la dimisión de Cristina Escoda ya que, su nefasta campaña y composición de lista electoral ha hecho que el PSOE en Benidorm siga perdiendo concejales y votos. Poco más de 6000 votos ha sumado Escoda lo que suponen 8 concejales, dos menos que en 2019, pero ojo, que podían haber perdido otro concejal más por tan solo 118 votos que, si los hubiese sumado Vox, la formación de Abascal en Benidorm sumaría dos concejales en lugar de uno y hubiese abocado al PSOE a un total de 7.

Y hablando de Vox. No está mal que sigan sumándose partidos nuevos a la corporación, al final dan un color especial al hemiciclo y en la diversidad está la riqueza. Propondrán sus cosas y serán escuchados por el equipo de gobierno a pesar de la aplastante mayoría absoluta. Perdemos a C´s y ganamos a un VOX que ha pasado de sumar 784 votos en 2019 a contar con 1551, lo que significa prácticamente duplicar su número de votantes. De todos modos esto es pasajero. VOX entra a formar parte del consistorio benidormense por marca, y para muestra un botón. Tan solo echen un vistazo a España y sobre todo a la Comunidad Valenciana. La gente fue a votar para echar a Ximo Puig y al Botánic de una vez por todas. Esta consideración impulsó a que muchos votantes de VOX a nivel autonómico aprovecharan también para votarles a nivel local, independientemente de la lista que presentara. Ya saben el famoso dicho que en las municipales no se vota tanto al partido sino más bien a las personas. Y por ello, estoy seguro que la gran mayoría ni tan siquiera conoce a su alcaldable. Fíjense, VOX consiguió más votos en Benidorm para su formación a nivel autonómico llegando a la cifra de dos mil votos a diferencia de los 1500 que han ido para el alcadable del partido de Abascal en Benidorm. Blanco y en botella. Hoy es Vox, ayer fue C´s y mañana será otro partido que aprovecha la coyuntura de los votos que van y vienen por las modas de los partidos políticos nuevos o seminuevos.

Pero hablemos del verdadero protagonista de hoy: Toni Pérez. La campaña del PSOE para intentar evitar su triunfo se resumió en asegurar que el alcalde de Benidorm se irá a la Diputación de Alicante como presidente si se diese una victoria de los populares en la provincia, como ha sido el caso, tanto en Alicante como en la Comunidad Valenciana. Si me preguntan, en lo personal, creo que Toni puede aspirar incluso a más, y por qué no, plantearse en un futuro no muy lejano una presidencia en la Generalitat, si es que el PP lo avala, cosa que considero a priori; sencilla. Aunque al menos, de momento, Toni sigue pensando por y para Benidorm y permanecerá en el ámbito municipal y como mucho podría compaginar la diputación y la alcaldía, cosa que sería positiva para Benidorm al igual que una hipotética presidencia de la Generalitat en el futuro para, entre otras cosas, frenar la ridícula infrafinanciación que sufre el municipio de Benidorm, mejorar el transporte urbano, acabar el Centro Cultural y otros tantos asuntos donde los benidormenses estamos desatendidos ya que desde Valencia mientras gobernaran socialistas y derivados, cosa que se acabó; naranjas de la china.

Volviendo al asunto de marras. Todo son buenas noticias en el PP de Benidorm. Toni Pérez sale muy reforzado, suman adeptos y votantes por doquier, han pulverizado todos los récords posibles habidos y por haber en la ciudad y ahora solo les queda seguir por la buena senda que trazaron hace ya dos comicios atrás y que, en estos terceros, la ciudadanía ha avalado por todo lo alto pidiendo una continuidad a gritos que esté a la altura de Benidorm y de este equipo de gobierno.

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Rodrigo Quesada / @Quesadacid