El alcalde, Marcos Zaragoza, retira la palabra y veta el derecho a réplica de la oposición en el Pleno municipal
En el Pleno municipal celebrado hoy el alcalde, Marcos Zaragoza, ha mostrado un talante poco dialogante e incisivo.
En el turno de ruegos y preguntas, una concejala ha formulado un ruego para que se acondicionen las escaleras de acceso a la playa de los Estudiantes. Carlos Soler, concejal de Juventud, Playas y Medio Ambiente, ha respondido al ruego afirmando que en ocho años del anterior equipo de gobierno no se ha realizado ninguna actuación en los accesos a las playas del municipio. Esta afirmación, que es totalmente incierta, quería ser matizada por el concejal del PSOE, Kiko Carreres, responsable de Servicios Técnicos en el gobierno de Andreu Verdú.
El alcalde, Marcos Zaragoza ha respondido que no había debate posible sobre el tema y no ha dado la palabra a la oposición. Ante esta situación injusta el portavoz socialista, Andreu Verdú, ha afirmado que no era un debate si no que, por alusiones, se debía poder responder a las graves acusaciones que se acababan de formular.
Zaragoza se ha mostrado inflexible y ha permitido que con total impunidad se afirme algo totalmente incierto en el plenario sin ningún tipo de capacidad para echar luz por parte de la persona a la que se acusaba abiertamente.
“Si este es el camino que Marcos Zaragoza quiere emprender durante las sesiones plenarias, el Partido Socialista toma nota”, ha manifestado el portavoz del PSOE.