El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido en una declaración institucional en el Palacio de la Moncloa sin preguntas para confirmar que el Consejo de Ministros ha aprobado el "indulto parcial, reversible y condicionado para los nueve de los condenados por el proceso independentista en Cataluña", una medida de gracia que, ha justificado, ha otorgado por "razones de utilidad pública".
Sánchez ha explicado que la vía jurídica terminó con la sentencia del procés, "que el Gobierno no cuestiona", pero que, "a partir de ahí", el Gobierno pretende con los indultos abrir "una nueva etapa de diálogo y cerrar el enfrentamiento".
Sánchez no espera que los condenados cambien o renuncien a sus ideas, "porque no se les condenó por defender sus ideas, sino por sus actos contrarios a la legalidad democrática". Aun así, hay que recordar que el indulto es parcial, lo que quiere decir que los nueve políticos presos continúan inhabilitados de cargos públicos cuando salgan en libertad.
Sánchez ha insistido en la "utilidad pública" de los indultos a los nueve dirigentes independentistas del procés "por la necesidad de restablecer la convivencia y la concordia" y porque ha dicho estar convencido de que, con ellos, "hay camino" para a convivencia.
La libertad, casi inmediata
La decisión de indultar conllevará la salida de prisión prácticamente inmediata. En el momento en el que el Gobierno comunique oficialmente al Tribunal Supremo, éste podrá ordenar la puesta en libertad incluso antes de que el BOE publique los decretos en los que se plasman esas medidas de gracia.
La intención de los magistrados es facilitar los trámites todo lo posible para que bien este martes o mañana miércoles sean puestos en libertad.
El Gobierno debe informar al tribunal que a su vez dictará una providencia para ejecutar el decreto del Gobierno y remitir un mandamiento a las prisiones correspondientes en el que ordene la puesta en libertad de los beneficiados. La ley de 1870 señala que "la aplicación de la gracia habrá de encomendarse indispensablemente al tribunal sentenciador", es decir, corresponde a los magistrados que se opusieron a su concesión en el informe que solicitó el Gobierno.
En principio, al no ser necesaria una nueva liquidación de condena, el tribunal dará por extinguidas las penas de prisión y puede incluso comunicarlo a las prisiones antes de dictar el auto correspondiente.
Indultos insuficientes para el separatismo
Después de meses de debate en la opinión pública, el Gobierno ha aprobado este martes los indultos a los líderes del procés entre críticas de la oposición, que los ven un "golpe a la democracia" mientras que los independentistas los consideran insuficientes y piden la amnistía.
Aunque ya se daba por hecho que los indultos se aprobarían esta semana, la confirmación la daba el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este lunes en un acto en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona.
Según avanza RTVE, el indulto se anulará si los presos delinquen entre tres y seis años después de la concesión de la medida de gracia.
En función del alcance de los indultos, el tribunal incluso podrá dar por extinguidas las penas de prisión. Lo hará en un auto en el que -de ser así- ordenará la inmediata puesta en libertad de los beneficiados. En caso de que las penas por malversación y sedición sean indultadas, el proceso será todavía más rápido.
Los indultos son parciales, es decir que se perdonará toda o parte de la pena de prisión pendiente aunque permanecerá la pena inhabilitación para ejercer cargos públicos. Si el Gobierno mantiene la pena de malversación, los trámites se dilatarán.
Es probable que los presos no se encuentren en prisión cuando se haga efectiva la excarcelación. La razón es el permiso que han solicitado por las fiestas de San Juan el miércoles por la noche, por lo que previsiblemente recibirán la notificación en sus domilios.
Los indultos han generado un revuelo en todo el espectro político. PP, Vox y Ciudadanos ya lo califican como un "golpe a la democracia y a la Constitución" mientras que los partidos independentistas lo consideran "insuficiente".
De hecho, cerca de 200.000 firmas llegaban al Congreso de los Diputados este lunes de manos de los partidos independentistas catalanes alertando de que la solución no son los indultos, sino la amnistía a todos los condenados por el referéndum del 1 de octubre de 2017. Casi en el mismo momento, el presidente del PP, Pablo Casado; el portavoz de Vox, Jorge Buxadé, y la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, también se dirigían a los suyos para avisar de que no cederán ante estas medidas de gracia, que recurrirán.