Sánchez anuncia que mañana serán aprobados los indultos entre gritos de "independencia" y "amnistía"

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este lunes en Barcelona ante unos 300 integrantes de la sociedad civil catalana y con la ausencia de miembros del Govern la aprobación de los indultos a los líderes independentistas del procés, que llevará al Consejo de Ministros este martes. momento que han aprovechado asistentes separatistas para interrumpirlo al grito de "independencia" y "amnistía".

El Gran Teatro del Liceu ha sido escenario de este acto en el que Sánchez ha pronunciado una conferencia titulada Reencuentro: un proyecto de futuro para España para justificar la medida de gracia. El jefe del Ejecutivo, que ha sido interrumpido por un asistente, miembro de Arran, al grito de "independencia" y "amnistía", se ha dirigido a representantes institucionales de Cataluña y de sectores como el político, empresarial, sindical, cultural, universitario, deportivo, de los medios de comunicación y de asociaciones civiles.

Fuera, grupos secesionistas convocados por asociaciones separatistas han recibido al presidente con abucheos y pancartas. "Nada a perdonar, todo para ganar", era el lema de la convocatoria de la ANC, que argumenta que "no se puede indultar por un delito inexistente y mucho menos esperar que esta sea la solución al conflicto catalán". La CUP también se ha movilizado por la presencia del Ejecutivo y la inminente aprobación de los indultos. "No hay solución sin autodeterminación y la amnistía para las más de las 3.000 represaliadas", escribe el partido en Twitter: "No vamos a renunciar a la independencia de los Países Catalanes. Este lunes movilizémonos por dejarlo claro: ¡independencia y amnistía!".

Òminum Cultural ha desplegado una pancarta en la que se puede leer "independencia y amnistía" en un entorno del Liceu fuertemente custodiado por presencia policial. Los Mossos d'Esquadra han desplegado un amplio dispositivo para blindar los alrededores del teatro, en el que han sido dispuestas vallas y han sido desplegados varios cordones policiales con el apoyo de varias furgonetas de los antidisturbios para impedir el acceso de los manifestantes.

En su intervención, Sánchez ha señalado que estamos ante una realidad "que no queremos ninguno, pero que hemos hecho entre todos". El jefe del Ejecutivo cree que podríamos seguir "infinitamente" en un ambiente de discordia o abandonarlo y apostar por la "concordia".

En alusión a los gritos que han obligado a Sánchez a interrumpir su discurso, el jefe del Ejecutivo ha reconocido que es "evidente" que hay parte de la sociedad que no respalada esta medida.

En opinión del presidente del Gobierno, que ha remarcado en varias ocasiones que no pide que los presos indultados renuncien a sus ideales, este es el momento para conceder la medida de gracia porque ha concluido la vía judicial, porque el Gobierno debe responder a la petición formulada y porque la pandemia ha recordado "lo que nos necesitamos unos a otros".

"Esperamos que se comprenda que no hay caminos fuera de la ley y que cualquier propósito no es legítimo si atropella a parte de la sociedad", advierte Sánchez sobre los indultados y sus posibles aspiraciones políticas en el mismo sentido que los llevaron a la cárcel. "Sacamos materialmente a nueve personas de la cárcel y sumamos millones a la convivencia".

Según Sánchez, en la balanza de las decisiones políticas, "el futuro debe importar más que el pasado". Aun comprendiendo los motivos del rechazo, el Gobierno ha optado por abrir paso a la "reconciliación", lo que permitirá, a su entender, "comenzar de nuevo y de hacerlo mejor esta vez".