Republicanos y demócratas se alían por vez primera para tumbar un veto de Trump
Estados Unidos ha acogido en la tarde de este lunes un hecho insólito en estos cuatro años. El Senado del país norteamericano, en el que tiene mayoría el Partido Republicano, ha anulado el veto de Donald Trump a la ley que regula la dotación del presupuesto anual que se destina a defensa. Se trata de una partida valorada en unos 741.000 millones de dólares.
Esta es la primera ocasión en la que republicanos y demócratas se han unido en la mencionada cámara para tirar abajo una disposición del ya presidente saliente. Nunca antes, en todo el mandato, el Congreso estadounidense había invalidado un veto del magnate. La relación de fuerzas que dado semejante resultado es la siguiente: 81 votos a favor y 13 en contra.
Una mayoría holgada, compuesta por ambos partidos, ha superado los dos tercios que se necesitaban para anular el veto presidencial y convertir la ley, en la práctica, en el presupuesto de defensa. Así ha finalizado un recorrido burocrático que va a multiplicar la tensión en los últimos días de Trump como máximo mandatario de la nación. En una revuelta final dentro del republicanismo, cuya mayoría ya ha reconocido a Joe Biden como presidente electo. Hecho que el magnate se niega a aceptar todavía.
Trump se había convertido en el primer presidente en casi seis décadas en mostrarse contrario a aprobar el presupuesto de defensa. Su argumento para vetar la llamada Ley de Autorización de Defensa Nacional para el año fiscal 2021 se basó en que el texto limita la capacidad presidencial para retirar a las tropas militares de Alemania, Corea del Sur y Afganistán. Esto es, le imposibilitaba cumplir una de sus promesas electorales.
También reseñó en su alegato contra la ley el dirigente que el texto incluye una provisión para cambiar el nombre de una decena de bases militares bautizadas en honor a los líderes de la Confederación sureña en la Guerra Civil (1861-1865). Esa modificación está relacionada con el intento de los legisladores por desterrar un símbolo que se considera racista, pues se entiende que representa a aquellos que defendieron la esclavitud. Pues bien, Trump destacó en sus intervenciones que por este motivo tampoco iba a permitir la aprobación de la ley.
Y remarcó que en su voluntad figuraba el añadido a la legislación de una cláusula que diera por finalizada la conocida como "Sección 230". Esta es una disposición que protege a los gigantes de internet como Twitter y Facebook de cualquier consecuencia legal derivada de los que publiquen en sus sitios web terceras partes. Por todo eso Trump vetó una ley que sirve, entre otras cosas, para financiar las operaciones del Pentágono en el extranjero y subir el suelo de los soldados, amén de mejorar el equipamiento militar y costear el cuidado sanitario de las tropas.
Mas, no es este el único elemento de fricción entre Trump y los barones republicanos del Senado. El magnate ha retrasado cinco días la firma de un nuevo plan de estímulo por la pandemia. Y reclama que se aumente de 600 a 2.000 dólares los pagos directos a aquellos ciudadanos afectados por dicha ley. La iniciativa yace frenada, a pesar de haber sido aprobada el pasado lunes por la Cámara Baja, porque los republicanos han bloqueado el intento demócrata de subir el monto de esas transferencias directas a los contribuyentes con una renta anual menor a 75.000 dólares.
Por ello, se espera que se vote de nuevo a partir de este domingo venidero, fecha en la que tomará posesión el Congreso confeccionado tras las elecciones de noviembre. El líder republicano en el Senado, Mitch McConnell, mencionó en su discurso de este viernes que "aprobar ese cambio sería socialismo para gente rica". De facto, los estadounidenses que cumplan los requisitos en base a la renta estarán en condiciones de recibir un pago único de 600 dólares. Según pauta el plan de estímulo antiguo, el aprobado en diciembre.