"Madrid es una espina clavada en el socialismo y el comunismo"
A Isabel Díaz Ayuso no le tiembla el pulso en su duelo con Pedro Sánchez. Todo lo contrario. Aunque no lo reconoce, sabe que le beneficia y se alegra de que el presidente se haya visto obligado a bajar a la arena a luchar con ella convirtiendo la campaña en un cara a cara entre el PSOE y el PP. Y, como dice, es él el que me ha retado por miedo a ser arrollado, el que se ha involucrado en la campaña “abdicando de gobernar España”. Ayuso no quiere ni oír hablar de las encuestas que vaticinan que estará cerca de conseguir la mayoría absoluta. Porque pretende evitar que alguien se relaje en la recta final de la campaña: “queda mucho por hacer. Hay que trabajar cada voto y cada escaño con la mayor humildad”.
Rezuma tranquilidad y seguridad. Es rápida y directa en las respuestas y se siente satisfecha de “la sensación de la calle, esa misma que ha perdido el PSOE”. No habla de pactos porque aspira a tener “una amplísima mayoría” para gestionar con eficacia un programa que va directo a lo importante: “salvar vidas y salvar la economía”.
En una entrevista con El Imparcial, Díaz Ayuso apenas menciona a Ángel Gabilondo porque sabe que su oponente real es Pedro Sánchez, al que acusa de mentir con las cifras de contagios porque “el Gobierno siempre va por detrás de la Comunidad de Madrid” y eso no nos lo perdona: “Madrid es una espina que tiene clavada el socialismo y el comunismo”.
Las encuestas le otorgan una victoria arrolladora.
Contamos con la sensación de la calle. Notamos que, aunque vayamos a Aranjuez, a Alcalá de Henares, a Getafe, a cualquier distrito o a cualquier pueblo pequeño del norte, del sur, del este o del oeste, todo el mundo nos para y nos saluda. Y noto que los madrileños tienen una grandísima ilusión por ir a votar el 4 de mayo. Yo presiento una participación histórica. Pero hasta que no se abran las urnas no se puede celebrar nada. Las encuestan son solo encuestas.
La encuesta de Tezanos refleja un empate entre los dos bloques. ¿Le beneficia o le perjudica?
Lo que prefiero es que nadie se relaje porque es cierto que queda mucho por hacer y porque, a pesar de que parece que voy a tener unos buenos resultados, al final, en efecto, hay dos bloques. Y puede que no haya tanta diferencia. Hay que trabajar cada voto y cada escaño con la mayor humildad porque, además, yo aspiro a obtener una amplísima mayoría por otros motivos. No solo por ganar sino por gestionar con eficacia, con austeridad, con un programa concreto y que vaya directo a lo importante.
Fernando Simón desmintió a Pedro Sánchez por decir que Madrid manipulaba los datos de contagios.
Esto demuestra varias cosas: el descontrol absoluto que hay en el Gobierno de España, el interés del presidente del Gobierno por ser candidato en Madrid pero no por echarse a las espaldas la gestión de un país. Y la falta de respeto a los madrileños por intentar meterles miedo de esta manera tan absurda. Pero, sobre todo, demuestra que es un mentiroso.
El PSOE siempre ha funcionado mucho con el miedo en las citas electorales. En este caso, lo busca al decir que en Madrid van a morir más personas por culpa de la Comunidad, lo que es tan falso como inadmisible. El PSOE también intenta que haya una baja participación y por eso han tratado de impugnar las elecciones, mi candidatura y ahora pretenden, incluso, impugnar mis eventos, mis actos.
¿Por qué Sánchez ha llegado tan lejos al acusarla sin pruebas de manipular los datos?
El PSOE siempre ha jugado con la Sanidad pública y lleva décadas intentado utilizarla en campaña. Primero era la Visa para entrar en los hospitales. Luego, que íbamos a dejar sin lancetas y material diverso a los diabéticos. No han dudado en inocular miedo a los pacientes del Zendal, que iban sugestionados y aterrados los primeros días. El Gobierno cambia los criterios y propaga que en Madrid se muere la gente. Evidentemente, las cifras no son buenas nunca, pero Madrid ha aprendido a conllevar esta epidemia y jamás hemos superado el umbral de los 900 cuando en otras comunidades, empezando por las socialistas, han pasado de los 1.100 y 1.200 con todo cerrado.
Y el aeropuerto de Barajas…
Entran turistas franceses y de todas partes del mundo. Y con ellos, la cepa sudafricana y la británica. Nos han mentido sobre la situación del aeropuerto. No hay control. Hemos pedido informes para ver qué controles hay en el aeropuerto. Queremos esos datos, esa política de datos seria, pero el Gobierno no contesta. Porque ni quiere ni puede.
Además, los franceses, por ejemplo, llevan mucho tiempo haciendo los test de antígenos en las farmacias, algo que nosotros pedimos hace meses y hasta que no pasó la tercera ola de las Navidades no nos hicieron caso, cuando lo podrían haber autorizado en noviembre o en diciembre y haber evitado que muchos positivos se hubieran reunido con sus familiares en esas semanas. El gobierno siempre va por detrás de la Comunidad de Madrid y eso no nos lo perdonan.
Luis María Anson ha escrito en El Imparcial que el Gobierno busca inventarse un caso de corrupción para perjudicar su candidatura
No me extrañaría nada porque lo llevan intentando desde hace más de dos años conmigo y si vieran la oportunidad de sembrar miedo o intentar sugestionar a la opinión pública, como hacen a través del CIS o de la Televisión Española, por supuesto que también lo harán ahora.
Ven una pequeña oportunidad en las elecciones, que no contaban con ella, de hecho, las dan por perdidas en general, pero no pierden la esperanza de agitar a la opinión pública por si suena la flauta.
¿Por qué el eslogan de libertad o comunismo?
Sobre todo, porque hay que votar al PP. En estos dos años hemos demostrado que nos hemos echado a las espaldas la gestión de los momentos más difíciles que se recuerdan en décadas, por no decir casi en un siglo, y que sin dejar nunca nuestros principios de libertad hemos sorteado los mayores obstáculos. Precisamente porque hemos tratado a los ciudadanos como adultos durante la pandemia y ahora en estas elecciones. Y hemos querido que fueran los ciudadanos, los hosteleros y los comerciantes quienes nos ayuden a salir adelante. Por eso, ahora les estamos pidiendo que, con responsabilidad, con información y con reflexión nos ayuden a salir del entuerto institucional en el que nos ha metido el Gobierno.
¿Qué diferencia al PP de los demás?
Yo creo que nos reconocen por varias cosas. La primera es que no somos una promesa, sino una realidad. Otros prometen hacer cosas, pero nosotros ya las estamos haciendo. Llevamos dos años así. Además de todo lo que hemos gestionado, no solo no he subido los impuestos, sino que he intentado bajarlos, aunque me lo hayan impedido a veces. He reducido trabas burocráticas, he ido cumpliendo mi programa, he protegido la educación en libertad en la Comunidad de Madrid, he ayudado a que la sanidad siguiera funcionando a pleno rendimiento y que los ciudadanos pudieran elegir y, sobre todo, repito, nos hemos echado a las espaldas la gestión económica en estos momentos contra todo y contra todos porque defendíamos la libertad por encima de todo.
Uno de cada cinco empleos que se han creado en estos últimos meses ha sido gracias a Madrid; si España no ha tenido peores datos económicos ha sido gracias a Madrid; si el comercio minoritario no se ha hundido como en otras comunidades es gracias a esa libertad que hemos defendido; si la cultura ha encontrado un escaparate a nivel europeo solo ha sido en Madrid. Y por esto mismo, no ha habido más depresiones, más aislamiento y más soledad, de la que ya de por sí se ha sufrido.
María Jesús Montero ha desmentido a Ángel Gabilondo sobre los impuestos
A Gabilondo le está chafando la ministra, pero también la hemeroteca porque dos meses antes de las elecciones había pactado con Más Madrid una subida de impuestos. Y ahora se contradice él mismo. A Gabilondo todos le están chafando esta campaña.
¿Cómo califica la campaña de Pedro Sánchez?
Pedro Sánchez ha perdido el pulso de la calle. Me muevo mucho, me recorro toda la comunidad y puedo asegurar que es así, La gente sabe diferenciar el discurso social del discurso socialista. Los comerciantes, los autónomos, los que peor lo han pasado, los repartidores, los taxistas, los ciudadanos que levantan Madrid se han dado cuenta de que al final resulta que la casta está ahí, en la izquierda. Con esas fotos de los aviones, las fincas, las cintas de correr, las facturas de champán, de jamón o de la niñera mientras fomentaban y permitían la okupación, respaldaban a gente que promueve el comercio ilegal al incluirla en sus propias listas. Por eso, los madrileños que pagan impuestos, que madrugan, que trabajan y que están pasándolas canutas, se ha sentido completamente alejados de La Moncloa.
¿Ha pensado reactivar algunas normas que quedaron paralizadas por la convocatoria electoral, como puede ser la Ley del Mercado Abierto?
Exacto. Aparte de la rebaja del IRPF, que será histórica porque será de medio punto en todos los tramos, además de seguir llevando deducciones fiscales a la Asamblea para que lo apruebe el Parlamento, que es donde he tenido ese freno. Hay que añadir políticas para ir acompañando a las personas que se hipotecan, que invierten, que compran o que contratan.
Llevamos varias reformas. Para empezar una Ley del Suelo que sustituye licencias por declaraciones responsables, que sustituyen trámites de 12 meses a prácticamente 24 horas. Y, en efecto, presentaremos la Ley de Mercado Abierto que permitirá que cualquier empresario, independientemente de la autonomía en la que opera, puede equiparar sus licencias en Madrid para ser como un madrileño más desde el primer día.
Contamos también con una calculadora de impuestos para que los ciudadanos sepan cuánto están pagando de su IRPF en servicios públicos. Esto sí que es transparencia y no tanto lo que gana el primo de un político.
También hemos creado un portal web que ya es una realidad para reducir trabas burocráticas; de manera que los empresarios, los autónomos y los ciudadanos puedan decir a la Administración donde están encontrando trámites obsoletos y en qué otros municipios o países esto mismo se resuelve de una manera mucho más ágil.
Casi todo esto se tramita desde la Consejería de Economía y Hacienda, pero desde la Presidencia trabajamos en una oficina virtual que también agiliza trámites, los digitaliza, para que cada vez los ciudadanos tengan que perder menos tiempo y verse asfixiados. Así es un alivio en todos los sentidos: tiene que haber legislación y haber impuestos, esto no es la ley de la selva y hay que sufragar unos servicios públicos, pero lo que se exceda en burocracia o lo que se exceda en leyes pasa de ser la ley de la selva a ser también la asfixia y también la nada otra vez.
Yo defiendo el término medio en todo, también en las políticas sanitarias. Creo que en ese término medio están las soluciones a la mayoría de los problemas.
Desde sus competencias, ¿cómo va a hacer frente a esa prometida subida de impuestos de la ministra de Hacienda?
Aparte de haber anunciado esa rebaja del IRPF, llevaremos a los tribunales al Gobierno siempre que sea necesario y rompa con la autonomía fiscal. Porque si todas las comunidades autónomas, excepto Navarra y País Vasco, tenemos un mismo régimen fiscal es para que dentro de nuestras competencias y nuestra autonomía recogida en nuestros estatutos, podamos decidir en nuestros tramos, en nuestra fiscalidad regional cómo queremos operar con nuestros impuestos.
Por ley tenemos derecho a decidir si bonificamos o no sucesiones, donaciones y patrimonio en el momento en el que el Gobierno nos la ha transferido. Lo vamos a defender en todo momento y, desde luego, toda recaudación que parta del tramo autonómico siempre será reducida para compensar. Se trata de un discurso maniqueo del Gobierno que lo único que pretende es atacar a la empresa en Madrid.
¿Cómo va a combatir los efectos de la Ley Celaá?
Aparte de que hemos prorrogado los conciertos educativos, al pasarlos de 6 a 10 años, tenemos ahora un plazo amplio para que pueda modificarse esa ley abyecta en el Congreso de los Diputados sin tener que tocar los conciertos en Madrid. Después, propondremos distintas iniciativas: una ley y una Proposición no de Ley de la Asamblea de Madrid para proteger y blindar la libertad de elección de las familias; sobre todo a raíz de los agujeros y la falta de interpretación que ha dejado la Ley Celaá por el camino porque como se han dado tanta prisa por urdir la Ley de Educación en lugar de la Ley de Pandemias han cometido enormes errores jurídicos. Y nosotros la vamos a corregir desde Madrid para impedirlo.
Y mientras esto es así, vamos a seguir construyendo todo colegio que pidan las familias en base a la demanda, que es lo que elimina la Ley Celaá, la demanda de la concertada, donde vamos a proteger la educación especial y la educación de excelencia. Porque, unos niños tienen dificultades y, otros, son brillantes y, por eso, encuentran muchos obstáculos en el camino. Como no hay dos alumnos iguales queremos protegerlos a todos.
¿Sospechaba que Ciudadanos preparaba una moción de censura en Madrid?
Llevamos un año en una situación de gran inestabilidad con un partido que tenía una sobrerrepresentación, como se estaba viendo y como se ha visto. Ha sido convocar elecciones y ahí está el resultado. Ciudadanos estaba en caída libre con dos almas dentro. Una que ha venido al PP y otra muy importante que era socialista. Se entendían con el PSOE en casi todos los ayuntamientos de la Comunidad de Madrid, presentaban juntos numerosas iniciativas y durante la pandemia se ponían siempre de parte del Gobierno o del Ministerio de Sanidad; no de la nuestra.
Cuando el día de la moción en Murcia explota todo. Hay otra en Castilla y León y a los 20 minutos me la presentan también en Madrid los partidos Más Madrid y PSOE. Comprobé que estábamos acertados, porque el PSOE hubiera presentado la suya y en un mes, con un partido en caída libre al lado, estaba convencida de que era la oportunidad que buscaba Sánchez para entrar en Madrid. Estaba en bandeja. Y prefiero, llegado este caso, que sean los ciudadanos los que decidan. Me duele más a mí que a nadie ir a estas elecciones, porque todos aspiran a tener el poder y yo me he visto obligada a despojarme de él. Pero lo de Murcia fue un bombazo porque empezó allí y acabó en Madrid. Ahora, como estamos inmersos en la campaña no somos conscientes, pero creo que de estos días se hablará en política durante mucho tiempo.
¿Se ha gestionado bien la pandemia en Madrid? ¿Le han dejado gestionar las restricciones como quería?
Desde el momento en que hay un solo fallecido nadie puede estar satisfecho. Haber gestionado tanto dolor es algo que lo vamos a llevar toda la vida. En la primera parte de la pandemia, en la primera ola, había un mando único y fue durante la segunda y la tercera cuando Madrid pudo ejercer con libertad sus competencias. Y hay que decir que nunca superamos un umbral de contagios y pudimos confiar en los ciudadanos y en su responsabilidad para salir adelante. El tiempo nos ha dado la razón.
Durante la primera etapa tuvimos muchas dificultades para comprar material sanitario. Se nos obstaculizaba. Luego estábamos todos los domingos pendientes de esas conferencias de presidentes, de 10 horas. Y, al final, Pedro Sánchez en julio decide que había acabado la pandemia. Desde entonces, hemos tenido intromisiones constantes en la Autonomía de Madrid, nos aplicaron a traición un estado de alarma ilegal y nos retrasaron el pase de fase en junio por los informes de un comité de expertos inexistente para no dejar a los independentistas al descubierto. Es decir, cada vez que han podido, desde Moncloa han intentado arremeter y meter la mano en Madrid de mala manera. Y socialmente yo creo que eso se está castigando ahora.
En cada ola hemos demostrado haber sido los más rápidos, los más eficaces y los más diligentes a la hora de traer material y a la hora de construir un hospital como IFEMA. En la segunda, porque supimos reabrir los colegios cuando nadie sabía cómo hacerlo. Y en la tercera porque supimos mantener a los comercios, a la hostelería y a cualquier negocio vulnerable en Madrid. En cada ola hemos demostrado que estábamos a una cosa: en la primera a salvar vidas y cortar la epidemia, en la segunda, a volver a una cierta normalidad y en la tercera, salvar la economía. Madrid siempre ha estado dando la batalla y mostrándole al país por dónde había que ir. Eso, en la soberbia “monclovita” no se sostiene, no se tolera, no puede ser que una administración inferior siempre te haya mostrado el camino.
¿Cree que Pedro Sánchez ha entrado en la campaña por temor a que una arrolladora victoria del PP pueda desestabilizar su Gobierno?
Sánchez no gestiona, ni siente ni padece tampoco. No se echa a las espaldas un problema. Francamente, no gestiona. Ha creado un equipo de demoscopia. Vive siempre cara a la comunicación y él, en su estrategia, pensaba agotar la legislatura vendiéndonos las vacunas, los fondos europeos y pensando que España traga como ocurre en Venezuela por los telediarios del régimen.
El Gobierno pensaba controlar a su manera las elecciones en Madrid, con su calendario, y de repente, al haberle cambiado el paso, se le ha desbaratado completamente el plan. Por eso, ha decidido abandonar Moncloa para meterse como candidato en Madrid. Pero llega un poco tarde porque nadie le cree, Porque durante un año, no ha gestionado nada y , de pronto, ahora que estamos en campaña, se muestra hiperactivo acudiendo a todas las ruedas de prensa.
Además, todo el mundo sabe que miente, pues es su forma de hacer política. No tiene ninguna credibilidad, ni a la hora de conformar Gobierno ni por las promesas que ha incumplido.
Sin ir más lejos, la UE acaba de recibir la denuncia de más de 2.500 jueces pidiendo amparo por la vulneración de la división de poderes en España; periodistas que han denunciado también ante las instituciones europeas el acoso por parte del Gobierno; otros muchos organismos internacionales que le desmienten cada día las cifras, la AIREF, el Banco de España, la Comisión Europea, que insiste en que miente con las cifras en el tema económico. Hará lo que sea porque vive para mantenerse.
¿Cómo puede afectar una victoria rotunda del PP en las próximas elecciones generales?
Yo creo que no toca hablar de eso ahora. Creo que ahora el Gobierno tiene una hoja de ruta con la que intenta cambiar España por la puerta de atrás, a través de una serie de medios que viven en torno a la Moncloa para imponer una forma de pensar, que intenta reescribir la Historia de nuestro país, tergiversar los valores, destruir al adversario, despreciar, destruir y expulsar de la vida política al centro derecha. Hasta despojarlo de legitimidad para existir como adversarios.
En esa hoja de ruta, Madrid es incómodo. Es una España dentro de otra. El 45 por ciento de las personas que residen aquí proceden de otras comunidades autónomas o de otros países. Los ciudadanos que viven aquí son muy exigentes, muy críticos. Y pagan muchos impuestos, madrugan mucho, tienen un nivel de vida costosísimo. Y no se paran a esperar que nadie les venga a solucionar nada.
Somos una clase luchadora, pero muy orgullosa de vivir en libertad y con la forma de vida que nos hemos dado. Aquí se viene a ser empresario, venezolano o vasco, en libertad. Todo esto a Pedro Sánchez se le escapa. No lo controla porque está acostumbrado a un argumentario, a que le bailen al agua y a que todo el mundo acceda a sus peticiones.
Madrid es una espina que tiene clavada el socialismo y el comunismo. El socialismo está para crear dependencia, subvención y a crear esa lucha de clases para mantenerse. El comunismo está a otra cosa: a mantenerse dentro de las instituciones para, a través de sus organismos o redes clientelares para desestabilizar España, como dice Íñigo Errejón.
Madrid es otra historia completamente distinta. El obrero es hoy un panadero, un taxista o una persona que ha creado una empresa con 50 empleados y que no está esperando a que nadie le venga a arreglar nada. Madrid y el PSOE son proyectos antagónicos.
¿Cree que tener a Pedro Sánchez como rival electoral le beneficia como candidata del PP?
En cualquier caso, demuestra la importancia de estas elecciones. Y lo celebro porque, en efecto, son trascendentales. Pero también es una forma de desenmascarar a este político. De hecho, ya se involucró en la segunda ola, cuando nos impuso ese estado de alarma de manera soberbia porque no soportaba acostarse con un titular donde decía que la justicia madrileña le había tumbado sus planes en Madrid.
Sánchez ha abdicado como presidente y, desde luego, primero con los madrileños porque el trato que le ha dado a Madrid muestra que no aspira a representarlos. Yo aspiro a representar a los 179 municipios de Madrid, por tanto, nunca les faltaré al respeto a mis alcaldes, aunque fueran de otro signo político, pero Sánchez no ha dudado en hacerlo.
Abdicó como presidente de los madrileños, pero ahora como presidente del Gobierno porque está en ‘modo candidato’. No está cumpliendo con sus funciones. Han vendido Madrid como un lugar inseguro, de turismo de borrachera, agresivo, machista, homófobo. Deben creer que la gente, los empresarios, los inmigrantes, los estudiantes y los artistas vienen aquí porque les gusta sufrir.
Y es que no conocen Madrid. Se creen que es una pedanía controlada por su partido de toda la vida. Piensan que pueden tratar a Madrid como a Andalucía hasta hace poco tiempo. Y no es así. La sociedad madrileña es absolutamente libre, creativa, tolerante, plural y muy informada y crítica. Crítica también con nosotros y celebro que así sea.
¿Así ve Madrid dentro de 6 meses?
Ya empieza a ser así. A pesar de lo mal que lo hemos pasado y de la cantidad de pérdidas de empleo y de cierres que ha habido, la gente tiene ganas de vivir. Un ejemplo es que con el temporal Filomena, ese mismo día, con un metro de nieve al lado, había gente en las terrazas tomando una cerveza. Esa forma de vivir a la madrileña, de salir, de pelear de los ciudadanos, desde los niños hasta los ancianos, ya está resurgiendo con mucha fuerza. Ahora vienen unos años muy potentes para la comunidad si sabemos aplicarlo en el sentido flexible, abierto, liberal y, sin perder nuestra tradición y nuestras esencias, hablando de vanguardia, digitalización…
¿Y qué opina del llamado 'efecto Iglesias'?
El efecto Iglesias no existe. Es un bluf. Cuanto más humilde es el pueblo o municipio que visito más me dicen que no quieren verlo por allí. Podrá mantener algún escaño por la marca, por lo que fueron, pero estoy convencida de que en los barrios más humildes es al último al que quieren ver por ahí.
¿Por qué no quiere hablar de posibles pactos poselectorales?
El plan es gobernar en solitario. Yo quiero hacer un gobierno autonómico de los mejores precisamente porque la vida nos ha puesto ante la mayor de las pruebas en estos dos años. He conocido perfectamente a mis consejeros, viceconsejeros y directores y tengo a los mejores gestores, expertos economistas, en tributos o en sanidad y quiero un gobierno más reducido, pero muy resistente y muy potente para los trámites que tenemos ahora que resolver.
Tenemos ahora una gran oportunidad porque hemos destacado en la pandemia por nuestra actitud y también porque cada vez se nos reconoce más en otros países, además de tener una fiscalidad atractiva, las ideas muy claras y ser la capital y la región mejor digitalizada de Europa con diferencia. Hay ahora más conexión en Villaconejos que en la mayoría de los barrios de Londres.
Todo esto, como digo, hace que Madrid tenga ahora una oportunidad para destacar por encima de todos. Tengo muy claro mi proyecto y lo que quiero. Yo aspiro a él y no me bajo de él. Y lo que tenga que ser, será después. El reto es maravilloso hacia adelante; lo peor ya ha pasado. Nada me gustaría más que los ciudadanos confiaran en los que han capitaneado esta situación para que ahora crezcamos con todo lo aprendido.
Soy muy crítica, sólo me preocupa hacer las cosas bien, estoy todo el día pensando en cosas nuevas para Madrid, qué más eventos o empresas se pueden traer, alternativas, oportunidades, empleo… Además, este es un momento único porque, a pesar de la inquietud por el futuro y por el resultado de las elecciones, es una delicia ir por Madrid ahora mismo. Solo puedo disfrutar. Así que disfruto y trabajo.