Las cartas con balas tampoco fueron detectadas en el Ministerio del Interior
Las cartas con amenazas de muerte y balas en su interior han transformado toda la campaña electoral madrileña desde que la candidata de Vox, Rocío Monasterio, pusiera en duda su veracidad y el candidato de Podemos, Pablo Iglesias, abandonara todos los debates con un llamamiento al cordón sanitario contra la ultraderecha.
Ahora, informaciones del diario El Mundo ponen de relieve graves fallos de seguridad en el Ministerio del Interior, que permitieron que las cartas con balas llegaran al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y a la directora de la Guardia Civil, María Gámez. El escáner de Interior no habría detectado las balas de cetme depositadas en los sobres, de modo que no sólo habría fallado el control en Correos, sino también en el Ministerio encargado de velar por la seguridad de los españoles.
Los primeros datos de la investigación apuntan a que, efectivamente se produjo un fallo en la detección de los sobres con la munición para el ministro Marlaska, el candidato de Podemos, Pablo Iglesias, y la directora de la Guardia Civil en Correos. No es el único error que ha motivado la llegada de las cartas a su destino. Una investigación interna realizada por Correos ha determinado que fue el fallo de un vigilante de seguridad lo que permitió que llegaran a sus destinatarios las cartas con amenazas y balas que recibieron el pasado jueves el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez.
Tras revisar las cámaras de seguridad, la empresa pública ha concluido que el vigilante no advirtió en el escáner los proyectiles, a pesar de que la imagen no ofrece dudas al respecto, según la información adelantada por la Cadena SER. La investigación también ha servido para comprobar que los tres sobres con las amenazas fueron "matasellados e inspeccionados el día 19 a las 17:48 horas".
Este informe de Correos ha trascendido después de que CCOO y UGT hayan pedido la realización de una auditoría interna para esclarecer cómo pudieron ser enviados esas cartas sin que fueran interceptadas en los controles de seguridad de la empresa pública antes de llegar al Ministerio del Interior.
Los sindicatos principales de Correos han enviado una carta al presidente de la institución pública, Juan Manuel Serrano Quintana, en la que expresan su "extrañeza" por el hecho. "Ante la extrañeza que supone la falta de detección de estos envíos por los mecanismos de seguridad de que dispone Correos, antes de su entrega al destinatario y el peligro que ello conlleva para los trabajadores y clientes de Correos, le solicitamos que nos informe de si se ha modificado la operativa de seguridad que venía funcionando hasta fechas recientes", señalan en el comunicado.
Una navaja a Maroto
Ahora, además, policías de la Científica que están analizando exhaustivamente las tres cartas con balas y amenazas tratan de determinar si el remitente de estas misivas es el mismo que ha enviado a la ministra de Industria, Reyes Maroto, un sobre con una navaja aparentemente ensangrentada entre dos CD. Los especialistas buscan restos de ADN y huellas, además de estudiar el papel y la caligrafía, pues en los tres envíos anónimos se incluyen mensajes manuscritos.
"Tienes diez días para dimitir. El tiempo de reírte de nosotros se ha terminado. Policía Nacional. Guardia Civil. El tiempo lo tienes en contra para los taponazos", se podía leer en el papel dentro del sobre con matasellos del 19 de abril dirigido a Grande-Marlaska y en el que se incluían dos cartuchos sin percutir del calibre 7,62 x 51. A los análisis de estas tres amenazas se añadirá el estudio del sobre que ha llegado al despacho de la ministra de Industria Reyes Maroto hecho público este lunes, en el que se aprecia que el origen de su envío fue El Escorial (Madrid), con fecha 21 de abril.
La Policía comenzará en las próximas horas a examinar su contenido, entre el que hay una navaja aparentemente ensangrentada. Si se trata o no de una sustancia artificial o de origen humano o animal lo determinarán los análisis, así como si el responsable o responsables del primer envío de las tres cartas es el mismo que el de este cuarto sobre.