La Guardia Civil libera a una mujer que llevaba más de un año viviendo en el garaje de una vivienda en contra de su voluntad
La Guardia Civil de Alicante ha detenido a un matrimonio
como presuntos autores de un delito de trata de seres humanos con fines de
explotación laboral, en el marco de la Operación Zenata.
La víctima, de origen argelino, había sido engañada por sus compatriotas, que la
atrajeron hasta España con la promesa de proporcionarle un puesto de trabajo
que le ayudara a obtener un permiso de residencia.
La investigación se inició a raíz del testimonio de un ciudadano, que acudió a la
Guardia Civil para explicarles, que una mujer estaba encerrada, en contra de su
voluntad, desde hacía más de un año, en una casa de la localidad de Agost.
Según el relato de esta persona, la mujer podría encontrarse en grave peligro
para su salud y su seguridad.
Ante la gravedad de los hechos, los agentes de la Guardia Civil que prestan
servicio de Seguridad Ciudadana en la localidad de Novelda, pusieron en
conocimiento del Equipo de Mujer-Menor (EMUME) de la Policía Judicial de la
Guardia Civil de Alicante lo ocurrido.
Fruto de las investigación, la Guardia Civil averiguó que los presuntos autores
habían traído a la víctima bajo engaño, aprovechándose de su situación de
necesidad y precariedad, con la promesa de proporcionarle un contrato de
trabajo en las tareas del hogar, que le permitiría solicitar su permiso de
residencia en España.
Una vez en el país, los presuntos autores le retiraron el pasaporte y la alojaron
en el garaje de la vivienda en la que residían. En unas condiciones de
habitabilidad infrahumanas, pusieron una cama e improvisaron un aseo. La
estancia no contaba con ningún tipo de ventilación, y el cableado de suministro
eléctrico de la vivienda, al descubierto, cruzaba la estancia colgando del techo.
La hacían trabajar sin descanso durante los siete días de la semana, ocupada en
las diferentes tareas del hogar, en la residencia de los presuntos autores. El
sueldo prometido, nunca se llegó a materializar.
En contadas ocasiones, salía al exterior, siempre acompañada para garantizarse
que no optara por escapar.
A la llegada de los agentes, la víctima presentaba un evidente estado de
desnutrición. En sus declaraciones, afirmó que había estado encerrada durante
más de un año y que, a pesar de haber sufrido varios desmayos debido a la falta
de alimento, le habían negado en todo momento ser atendida por un médico.
Además, aseguró que la escasez de comida era tal, que desde que fue privada
de su libertad, y tras su liberación, había bajado de peso más de 20 kilogramos.
En un momento dado, la mujer consiguió comunicarse a través de Internet con
un familiar, al que le explicó lo que estaba pasando. Fue éste quien inició los
pasos necesarios para pedir auxilio.
Los presuntos autores son un matrimonio de empresarios de origen argelino que
reside por temporadas en España. Durante el último año habían permanecido de
forma continuada en nuestro país con motivo del estado de alarma decretado,
para frenar el avance de la pandemia.
Han sido detenidos un hombre (50) y una mujer (44), ambos de nacionalidad
argelina, a los que se les imputan un delito de trata de seres humanos con fines
de explotación laboral, un delito de detención ilegal y un delito contra los
derechos de los ciudadanos extranjeros.
Han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Novelda,
quedando en libertad vigilada, con cargos.
La mujer liberada ha sido puesta en contacto con una Organización No
Gubernamental sin ánimo de lucro, de ayuda a las víctimas de la trata de
personas. En la actualidad se encuentra residiendo en una casa de acogida en la
que se recupera de lo ocurrido.
Equipo especializado en la lucha contra la trata de personas desde 1995
Hace 26 años se crearon los Emumes (Equipos mujer-menor) de la Guardia Civil
con el objetivo de erradicar, además de los delitos relacionados con la trata de
personas, cualquier tipo de violencia que se ejerza sobre las mujeres y los
menores.
Sus miembros, cuentan con una formación especializada, y son los responsables
de proteger a las víctimas más vulnerables, en casos como éste.
Para el desarrollo de la labor de los EMUME´s resulta fundamental la actuación
de los agentes encargados de las labores de Seguridad Ciudadana, ya que en la
mayoría de los casos, serán ellos los que valoren en un primer momento si
efectivamente puede existir un delito de trata de personas.
Una vez que sea detectado por la Guardia Civil, será el Equipo EMUME el que se
encargue profundizar en la investigación.