Clasificatorio Catar 2022. El hueso griego expulsa de las nubes a España | 1-1

El último partido disputado por la selección española hasta este jueves fue un 6-0 a Alemania, en la última jornada de la Liga de Naciones. Cuatro meses después, el combinado preparado por Luis Enrique debutaba en la fase de clasificación para el Mundial de Catar 2022. Competiría ante Grecia, un bloque que se encuentra en plena reconstrucción, tras tomar el mando John van 't Schip. La apuesta helena se ha dirigido hacia una paleta más colorida y ha apeado del barco a nombres conocidos como Siovas, Manolas y Papastathopoulos. Para dejar paso a la juventud y el talento.

España, que sufría las bajas de Pau Torres y Sergi Roberto, repitió el once que arrasó a los germanos en noviembre. Marcos Llorente ocupó el lateral diestro y protegería al meta Unai Simón junto a Sergio Ramos, Eric García y Gayá. Rodri, Koke y Canales conformaban en eje y el ataque correspondería a Dani Olmo, Ferrán Torres y Álvaro Morata. Con esos mimbres el seleccionado nacional saltó al verde del Nuevo Los Cármenes con la intención de monopolizar la posesión. Y lo logró, promocionado por el volantazo defensivo visitante.

Se plantearía un duelo de estilos rotundo, con examen de creatividad y paciencia incluido. Porque Canales, Koke y demás artistas españoles se las verían con una red de ayudas que comprimió los espacios y constriñó al favorito a crear en estático. Y ese ajedrez se le atragantaría a los subordinados de 'Lucho'. La circulación de pelota resultaba lenta y densa, el juego entre líneas brillaba por su ausencia, las superioridades por banda no fructificaban -con el puesto improvisado de Llorente señalado- y el bagaje de remates reseñables se limitaría a dos en todo el acto inicial.

Contra un escuadrón que no se ha clasificado para la Eurocopa -no compite en un gran torneo desde 2014- y que yace en la tercera categoría UEFA, sólo se contabilizaría peligro en dos oportunidades antes del descanso. Después de varios Intentos flácidos de Koke y Olmo, al borde de la media hora chutaba al larguero el regateador del Leipzig. Y en el 33 amaneció el único chispazo de calidad registrado. Koke dibujó un pase quirúrgico, vertical y sedoso que Morata controló con mucha clase. El atacante de la Juventus ejecutó una maniobra excelsa de coordinación y embocó el 1-0. Descubriendo luz en la maraña en la que viajaba su colectivo.

Lo mejor al entretiempo, sin duda, el marcador y la buena presión que anuló los intentos griegos por contragolpear. Ramos sería suplido por Íñigo Martínez de cara a un intermedio en el que Morata disparó al lateral de la red. El delantero quiso reivindicarse, participativo, mas no encontraría otra diana. Y el central del Athletic cometería una imprudencia que cambió del todo la deriva del encuentro. En el minuto 56, se lanzó para despejar una pelota en el área. Llegó a repeler el cuero, pero en su deslizar acabó pisando la rodilla de Masouras. El colegiado interpretó pena máxima -no hay VAR para este clasificatorio-. Y Bakasetas transformó el penalti con un cañonazo centrado. En el único tiro entre palos que generaría su delegación. Para terminar de contaminar de dudas a una selección nacional que se sabía gris.

Se detonaría una contrarreloj de más de 30 minutos. Comparecerían Thiago y Oyarzabal, y debutarían Pedri y Bryan Gil -por los ausentes Ferrán Torres y Canales, amén de Koke-. Y España pretendió traducir su 70% de control del cuero en peligro, en verticalidad. Sin embargo, se le atragantaría de nuevo el sistema heleno -que había metido en cancha a Tzolis, Siopis, Fourtunis, Giakoumakis y Kiriakopoulos-. El anhelado asedio local al arco defendido por el portero Vlachodimos sólo acogería el desborde de Gil, un testarazo desviado de Morata y en centro envenenado, sin remate, de Gayá. Arrancarían los ibéricos victimizados por la falta de claridad -en la profundidad y la finalización- que uniforma el estilo en impotencia (dos lanzamientos a puerta en 90 minutos). Por la elección de peones que no son titulares en sus clubes, la altura de la temporada y la suplencia de piezas nucleares como Sergio Busquets o Jordi Alba.

- Ficha técnica:

1 - España: Unai Simón; Marcos Llorente, Sergio Ramos (Íñigo Martínez, m.46), Eric García, Gayá; Rodri, Koke (Thiago, m.72), Canales (Bryan Gil, m.64); Dani Olmo (Pedri, m.64), Ferrán Torres (Oyarzabal, m.72) y Morata.

1 - Grecia: Vlachodimos; Bakakis, Papadopoulos, Tzavellas, Tsimikas (Kiriakopoulos,m.80); Zeca, Bouchalakis, Mantalos (Tzolis, m.46); Limnios (Siopis, m.46), Masouras (Fourtunis, m.65) y Bakasetas (Giakoumakis, m.78).

Goles: 1-0, m.33: Morata. 1-1, m.56: Bakasetas, de penalti.

Árbitro: Marco Guida (Italia). Amonestó a Íñigo Martínez (55) por España y a Zeca (81) y Giakoumakis (83) por Grecia.

Incidencias: primer encuentro de clasificación al Mundial 2022 disputado en el estadio Nuevo Los Cármenes a puerta cerrada.