Sandra Sánchez hace historia al ganar el primer oro olímpico del kárate
La karateca española Sandra Sánchez ha hecho historia al ganar el primer oro olímpico de la historia de los Juegos tras imponerse a la japonesa Kiyou Shimizu en kata. A sus 39 años, la española es campeona olímpica, campeona del mundo, seis veces campeona de Europa y es considerada por la Federación Mundial como la mejor de la historia.
Antes de la final, la española mostró sus mejores deseos para ella y su contrincante: "Yo lo que quiero es que su kata salga bien y el mío también, que no haya errores y las dos consigamos hacer nuestro mejor kata y que gane la mejor".
'Es bueno para el kárate, es la final que esperaba todo el mundo', dijo sobre la coincidencia con su gran rival, a la que ya ganó en la final del último campeonato del mundo.
Y ha vuelto a hacerlo. Sánchez, que llegó a Tokio "sin nervios de más y con mucha confianza en el trabajo" ha logrado el preciado metal, que según aseguró, no era su objetivo.
Objetivo: un kata perfecto
"Yo me planteo que el objetivo no es conseguir el oro, es hacer unos katas tan buenos y perfectos que eso valga esa medalla olímpica. Es diferente manera de plantearlo. El resultado no va a ser un fracaso sea cual sea si conseguimos sacar lo que hemos entrenado y damos nuestro mejor versión", dijo antes de que comenzara la competición.
En la modalidad de kata cuentan las formas, no el combate, y se tienen en cuenta la fuerza, velocidad, equilibrio o potencia, además de la expresión y claridad en los movimientos. Y, en todo ello, Sandra Sánchez era, es y puede que sea la mejor.
Para la final, eligió la kata 'Chatanyara Kushanku', y le dio una puntuación de 28.06 con un 19.60 en rendimiento técnico y 8.46 en rendimiento deportivo. Superó, con ello, a la misma kata por la que optó la nipona, con la misma nota en rendimiento técnico pero inferior en el deportivo (8.28), para quedarse en 27.88 global.
Habrá que esperar a ver si el karate vuelve a ser olímpico más adelante, pero de momento, en el estreno, la española es la primera medalla de oro olímpica del karate, al ser la kata femenina la primera de las pruebas en llegar a su fin.